En un mundo en el que constantemente se nos anima a " mantener una actitud positiva " y " ver el lado positivo ", es fácil creer que mantener una actitud positiva es la clave del bienestar mental. Pero ¿qué pasa si este enfoque incesante en la positividad está haciendo más daño que bien?
¿Qué es la positividad tóxica?
La positividad tóxica es la idea de que siempre debemos ser felices, sin importar por lo que estemos pasando. Si bien mantener una actitud positiva puede ser útil, forzarla puede impedirnos lidiar con emociones reales como la tristeza o la frustración. Ignorar estos sentimientos puede dificultar la curación y el crecimiento.
¿Por qué es importante?
Pretender que todo está bien cuando no es así puede llevar a:
Supresión emocional : reprimir los sentimientos en lugar de expresarlos.
Vergüenza : Sentirse culpable por no ser feliz todo el tiempo.
Conexiones perdidas : Evitar conversaciones reales porque podrían ser “negativas”.
¿Qué podemos hacer en su lugar?
En lugar de forzar la positividad, centrémonos en:
Reconocer nuestras emociones : está bien sentirse triste, enojado o estresado.
Servulnerable : comparte lo que estás pasando con alguien en quien confíes.
Autocompasión : sé amable contigo mismo, especialmente durante los momentos difíciles.
Reflexiones finales
La salud mental no consiste en estar feliz todo el tiempo, sino en ser sincero contigo mismo y con los demás. Está bien no estar bien. Si te sientes abrumado por la presión de mantener una actitud positiva, estoy aquí para ayudarte. ¡Hablemos!